4 de abril de 2010

Pensé que no haría ruido

Pensé que no haría ruido. O que éste sería un ahogado eco casi imperceptible. Nada parecía indicar lo contrario, ni la forma, ni la consistencia, ni la textura del envoltorio que las recubría. Pero me equivoqué. Aquello sonó como una explosión, como un terremoto de grado ocho, como un cataclismo, como la maldita tercera guerra mundial. Y allí estaban todas esas personas en torno a mí, mirando, como si en el andén no hubiera nada más que mirar, con esa sonrisita de superioridad que parecía asegurar que jamás se habían visto ni se verían en una situación semejante. Solamente el hombre de la cara ancha la giró algo cuando mis pupilas buscaron las suyas e hizo un torpe esfuerzo por aguantar la risa. El resto, el resto disfrutó del momento y lo hizo con ganas, dejándose el alma y la mandíbula en la tarea.

Sí, cuando tropecé y sentí como inevitable que mis nalgas se posaran en el suelo del andén, pensé que no haría ruido.


Creumont

17 comentarios:

Carolina Conde dijo...

Genial, como siempre.
Gracias, Verito.
Un beso grande

roberto dijo...

Estupenda foto y estupendo texto. Gran combinación. Para caerse de culo...

J.E. Alamo dijo...

ja,ja,ja. Muy bueno.

Javier Gay Lorente dijo...

Es Autobiografico?? jijiji

VERONICA LEONETTI dijo...

Hola Caro! gracias a ti por pasearte por aquí de nuevo. Un besote.

Hola, Roberto. Pues sí que me sorprendió mucho Creumont con este texto. Está para repetir y todo.

Gracias, Joe. Precisamente quería que fuese un poco graciosa la cosa.

No sé Javi. Pregúntaselo a Creumont (tú que lo conoces!). Yo me pregunté lo mismo, pero prefiero quedarme con la duda. :)

Anónimo dijo...

Agudísimo y sorprendente, como siempre.
Gracias Creumont por tu humor que hace grande lo pequeño.
Kata

Nader dijo...

A mí las caídas me provocan sentimientos encontrados: me hacen gracia si no son graves porque es curioso ver cómo el damnificado intenta salir airoso del mal trago. Pero, por otro lado, me pongo en el lugar donde se encuentra la cámara en tu foto y esas caras me harían mucho daño :(

VERONICA LEONETTI dijo...

Hola, Kata. Muchas gracias. Realmente Creumont es muy grande y ya estoy pensando en darle más trabajo. Me gusta mucho su manera de ver mis fotos.

Hola, Nader. A Creumont le ha dado por ver la cosa desde ese ángulo que creo que es genial. Por lo visto ha despertado distintas sensaciones. Desde la risa hasta el dolor. A veces uno también se ríe de dolor. A veces la risa duele...

NáN dijo...

Para esas situaciones se inventó la jaculatoria "tierra trágame". Siempre que alguien no pregunte "¿Se ha caído?", se puede salir airoso si te unes a la risa.

La cámara está muy baja y las sonrisas son sinceras. Imagino que la foto tendrá su pequeña historia.

Buena pareja hacéis.

Sebastià Martí dijo...

coño! los conozco!
me gusta la foto y el texto muy agudo. Saludos!

Enric Herce dijo...

Eso sí que es saber darle otro significado a una instantánea. Debo confesar que hasta que he no llegado al final pensaba que el problema tenía más relación con el aparato digestivo que con el locomotor. :)

haizeko dijo...

Muy bueno!Este creumont es un genio,no sólo dibuja,también escribe bien!

VERONICA LEONETTI dijo...

Gracias, NáN. No sabía nada de esa Jaculatoria! suena muy útil.
Pues sí, sí que tiene algo de historia.

Hola Sebastiá. Gracias! los conoces a todos?

A lo mejor eso es lo que quería Creumont, Enric. Engañarnos y luego hacernos reír.

Tiene razón, Haizeko. El chico sabe de todo y más!

Maetma dijo...

Entro por primera vez en este blog gracias al texto de Creumont, que me ha parecido formidable. No sé si será autobiográfico como alguien pregunta; yo sí tengo una caída autobiográfica pero no había cámaras, a Dios gracias.
Es bueno este chico. Y también dibuja de....como decís vosotros.

VERONICA LEONETTI dijo...

Hola, Maetma. Yo también tengo mis buenas caídas y metidas de pata autobiográficas. Quién no?
Y es verdad, este chico tiene un talento increíble. Y como no se le suba el ego con todos estos comentarios...

Unknown dijo...

Gracias a todos/as por los comentarios, por la parte que me toca. Debo estar de todos los colores ahora mismo. El juego que me propuso Verónica (escribir algo a partir de su fotografía) me resultó enormemente divertido, aunque la dificultad no era pequeña (tal vez por eso). Mi gran alegría fue conseguir sorprenderla, por una vez, yo a ella, ya que suele ser al revés. Gracias, Vero, por este bonito reto y por todos los instantes mágicos que compartes con nosotros en tu blog.

VERONICA LEONETTI dijo...

Gracias a ti, Miguel. Tu siempre sorprendes y además, sabes muy bien como alegrarle la vida a la gente. Y ya que te veo tan entusiasmado, corriendo te envío el próximo reto!!!