Dedicado a Pedro
Mi padre duerme.
Su semblante augusto figura un apacible corazón;
está ahora tan dulce...
si hay algo en él de amargo seré yo.
Hay soledad en el hogar; se reza;
y no hay noticias de los hijos hoy.
Mi padre se despierta, ausculta la huida a Egipto,
el restañante adios.
Estás ahora tan cerca;
si hay algo en él de lejos, seré yo...
César Vallejo
9 comentarios:
Tristeza y muy honda con estas palabras y la maravillosa fotografía.
Hermosa y triste fotografía.
La fotografía es impresionante y el texto de Vallejo la calza como un zapato a la medida.
Con hijas como tú se vive una segunda vida.
¡Qué agudo sentido de culpabilidad desprende!
¡Hay tanto en estas hermosas palabras encarceladas!
Muchas gracias a todos!
A veces vale la pena acercarse a la tristeza, que en palabras de Vallejo se convierte en placer. Y también rescatar imágenes olvidadas. Esta en particular, la pobre, se había quedado olvidada en un archivo.
A menudo, encontrar la forma de expresar nuestra tristeza es el mejor homenaje y recuerdo que podemos ofrecer a los ausentes.
La reja es igualita a la que cubría la ventana de mi parvulario.
Gracias, Enric.
Pues le encontré una belleza especial a esas oxidadas rejas.
Si hay algo en él de lejos, seré yo... Ufff, Vallejo.
Como siempre, tus fotos me hacen sentir. La de las manos de más arriba, uffff...
Besets
Gracias, Coralet.
Justo nombras la frase que me hizo escoger el poema.
Un beset!
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