En el medio de la noche uno puede sentir la voz de ciertas casas. A través de los siglos nos hablan quienes rieron por sus pasillos, murieron en sus camas, impregnaron sus muros con el amor encendido de sus cuerpos. En el medio de la noche el tiempo se hace voz y nos habla de los recónditos secretos que anidan tras las ventanas, que destilan las paredes. Misterios que las fachadas custodian con el celo de un dragón que guarda su tesoro.
8 comentarios:
Buen tesoro esta entrada...
Ya te digo Roberto. Un lujo contar con José Miguel para ella.
Tan ciertas y hermosas palabras como esa imagen tan bella, una arquitectura para los sentidos.
Besos
Me quedo con ganas de más... Venga, contadme un cuento hermoso.
Hola, Isabel. Mil gracias y besos!
Joe, eso se lo dejo a José Miguel, que es el experto ;)
Qué tándem, Jesús. Nunca me canso de vuestras colaboraciones.
Gran imagen!
Gracias, Chicos!
Y ahora un poco más del cuaderno 2012.
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