27 de octubre de 2009

Mujer soñando


Te he visto en este metro que vuela bajo tierra.

A través de un paisaje que no es paisaje.

Tu expresión, tu cara, tu pequeña embajada de sentimientos

es una entre decenas que se aprietan por costumbre

en este vagón loco que salta de dimensión en dimensión.

Creo que he entendido tu claustrofobia.

Y que por eso has cerrado los ojos.

Y sé que te has imaginado en otros lugares,

con otras personas.

¿Has sentido el sol?

Cada mañana cada metro que pasa

cada minuto juega al tetris con los cuerpos humanos.

No dejaremos que sea así con las almas.

Y que bailen éstas inmensas,

cuando una pasajera que amanece cansada como tú

cierra los ojos y se sueña en tierras bañadas por mar.


José Miguel Vilar-Bou




16 comentarios:

Joe dijo...

¡Qué par de dos! Aun tengo la emoción encrespada.
Por cierto, disfrutad de esta entrada con el Changing of the Guards de Dylan. Como tomar chocolate negro con una copa de champagne.

Antonio Ruiz Bonilla dijo...

Al final, todos somos lo que no estamos siendo. Y sólo nos queda la espera.
Un saludo

uve dijo...

Vero, ya veo que te has aplicado estos días! Nueva cabecera y todo...
yo un poco desconectada pero ya de vuelta.

pedazo de foto!

el caiman de legutiano dijo...

Me ha gustado mucho la foto, queda muy bien con el texto, que por cierto también está muy bien escrito.
¿Cómo haces para encontrar siempre el fragmento preciso? ¿Leedora compulsiva? ¿Wikipedia? :D

VERONICA LEONETTI dijo...

Me emociona poder emocionarte Joe.
Y gracias por la canción!
Un abrazo.

Hola Antonio. Bienvenido!
Es así, la espera es lo que nos queda y es muy bello poder fotografiarla.

VERONICA LEONETTI dijo...

Vero, Vero! Gracias guapa.
Sip, intento aplicarme y hay que cambiar de cara de vez en cuando.

Hola Aitor,
Gracias! La verdad es que el texto es maravilloso y esta vez no fuí yo la que lo escogió. Fué adjudicado por su propio autor.
También muchas veces son los textos los que me encuentran a mi y luego yo se lo doy a la imagen que creo le puede pertenecer. Pero sí, también es verdad que desde que sé leer soy un poco compulsiva con las letras. :)

Txemacantropus dijo...

Velocidad y reposo, es incongruente pero me sucede en el metro o en un tren.

Coralet dijo...

Me gusta el poema. un beso

VERONICA LEONETTI dijo...

Hola Txema.
Hay que ver las cosas que le pueden pasar a uno en un tren, además de todas las que no pasan, sin que uno se dé cuenta.

Hola Coralet, gracias! bienvenida, y otro beso!

aitana carrasco dijo...

qué buen tándem

VERONICA LEONETTI dijo...

Y que bueno es verte por aquí Aitana. Gracias! y un gran abrazo.

stygryt dijo...

Enamorarme en el metro es una de las sensaciones que más me gustaba cuando vivía en París. Cada día podía ser una sorpresa y el viaje se repetía 2 veces cada día... dos oportunidades contra el olvido.

Enric Herce dijo...

Formáis un tándem cojonudo. Letra e imagen se funden en un sentimiento perfectamente reconocible.

VERONICA LEONETTI dijo...

Ya me imagino, Stygryt, que viviendo en París todo debía de ser muy intenso y difícil de olvidar.
Que bonito eso de enamorarse a diario.

Gracias Enric,
Es una gran suerte encontrar buenos compañeros de trabajo. De esos que te dejan sus textos cuando no sabes que poner en tu blog :)

Marcos Mateu dijo...

Me encanta como centras la atencion en la mujer que mira de frente desde la distancia a base de perspectiva, foco y color!

VERONICA LEONETTI dijo...

Hola Marcos! bienvenido a este humilde espejo.
Muchas gracias!
Pero sabes qué? en realidad nada en esta foto fue hecho con intención.